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  • Foto del escritorZacur Córdova Mesina

¿Sirves al Señor o a ti mismo?

¿Qué quieres conseguir con tu blog? Hace mucho tiempo me hicieron esta pregunta. En un mundo en el que las redes sociales y su éxito se mide por la cantidad de seguidores e interacción que tienes con ellos, debo reconocer que la lucha por no caer en aquella corriente es diaria y nadie está libre. Por supuesto, ésta situación evidencia la lucha con el orgullo que hay en el corazón.

¿Cuándo comienza el problema? Cuando nos comparamos con otras personas y comparamos nuestro servicio en relación con los ministerios en los que ellos sirven. También, en el hecho de pensar que el éxito de nuestro servicio y ministerio en las redes sociales se pueden medir bajo estándares humanos, por ejemplo: la cantidad de seguidores ganados en un mes, el número de comentarios y likes recibidos por parte de la comunidad, etc. Y sabes, en parte es normal, mas no saludable, caer en este pensamiento, porque necesitamos sentir que lo que hacemos es valioso, útil y aceptado. Llegamos a creer que nuestra recompensa viene de las personas, y si el contenido publicado no tiene interacción con nadie, entonces concluimos que el ministerio no está andando bien. ¡Qué equivocados estamos! Es necesario escuchar nuevamente lo que el Dios de la Biblia nos dice en Su Palabra.


Si vas a servir en la iglesia, administrar una red social o blog, ten en cuenta lo siguiente, la Biblia nos dice que:


1. El servicio debe hacerse con humildad (Hechos 20:19; Santiago 4:6). Para poder servir tenemos que reconocer que somos pequeños. Leamos lo que nos dice Pablo:

Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la iglesia de Dios. (1 Corintios 15:9)

Esto, Pablo lo dice durante el tiempo que estaba comenzando su ministerio, pero cuando el apóstol Pablo progresa en la vida cristiana, nos comenta lo siguiente: Yo fui el primero de los pecadores (1 Timoteo 1:15).


¿Se entiende? La vida de humildad de un siervo va creciendo en la medida que conoce a Jesús. No hay lugar para el arrogante ni para el soberbio.


2. El servicio debe estar apoyado en la gracia (1 Corintios 15:10). Si no tenemos recursos y dependemos del Señor, el servicio debe ir acompañado de la gracia de Dios. Pablo mira su ministerio y dice: He llenado casi todo el territorio del evangelio, mas no yo, sino la gracia de Dios conmigo (1 Corintios 15:10).

  • No es Pablo, es la gracia de Dios.

  • No es el poder de Pablo, es el poder de Dios.

  • No es la acción de Pablo, es la obra del Espíritu Santo.

Cuando vivimos en esta dimensión estamos comprendiendo que el servicio es una enorme bendición. No hay lugar para el jactancioso.


3. El servicio debe hacerse de buena voluntad (Efesios 6:7). Mira, en la iglesia podemos encontramos personas:

  • Insoportables

  • Raras

  • Insatisfechas, que se quejan por todo, y aunque pintes el templo bañado en oro, está mal. Todo está mal para ellos.

La realidad es que la iglesia no es una asociación en la que buscamos amigos, sino que buscamos a los miembros del Cuerpo de Cristo. Para mí hay mucha gente rara, para la iglesia yo debo ser un raro, esto es mutuo. Pero tú eres mi hermano no por tu nombre, sino porque estás en Cristo, y tengo necesidad de amarte porque amo a Cristo.


Lee con mucha atención esto: No digas que amas a Jesús si no eres capaz de amar a tu hermano. Y si no eres capaz de amar a tu hermano, pregúntate si naciste de nuevo. Es muy serio todo este asunto.


Bien, estábamos hablando sobre que el servicio tiene que ser de buena voluntad. Si es con queja, mejor no lo hagas por ahora. Es necesario y crucial que todo servicio que decidamos hacer sea siempre de buena voluntad y no por obligación. Veamos lo que dice la Biblia, por favor:

Efesios 6:7 Reina-Valera 1960 sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres,

4. El servicio debe hacerse con amor (1 Corintios 13:1). El amor es indispensable para servir. Si no tienes amor deja de servir, leamos lo que dice la Biblia:

1 Corintios 13:1 - RVR 1960 Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe.

El ministerio más importante o el servicio más pequeño al ojo del hombre, si no está basado en el amor, es ruido que molesta a Dios y que molesta a la iglesia. Esto evidencia la siguiente cita:

Gálatas 5:13 Reina-Valera 1960 Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros.

5. El servicio se debe hacerse con compromiso (Colosenses 3:24). Tu compromiso es con el Señor, no con los hombres. Tu sirves al Señor, y sirviendo a los hermanos estás sirviéndole a él. Lo podemos ver en el siguiente versículo:

Colosenses 3:24 - RVR 1960 sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.

6. En el servicio no hay títulos, solo siervos (1 Corintios 4:1). "Yo soy doctor en teología... yo tengo un blog con 2 millones de seguidores" No, eso en la calle. En la iglesia el título máximo que puede tener un creyente es “siervo". Mira como lo que nos menciona Pablo:

1 Corintios 4:1 - RVR 1960 Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios.

7. El servicio debe tener como fin la Gloria de Dios (1 Corintios 10:31). Si vas a abrir un blog para tener seguidores y hacer de tu persona el centro del blog (ser tú el rostro central), no estás sirviendo a Dios, estás sirviéndote a ti mismo y buscando tu propia gloria; no la de Dios.

1 Corintios 10:31 - RVR 1960 Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.

Estamos en tiempos donde la iglesia y las redes sociales están sobradas de líderes e influencers y necesitada de siervos. Es mi deseo que el Señor nos ayude y su Espíritu Santo nos asista para poder servirle según el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. Volvamos a la Biblia, en ella podemos encontrar la voluntad de Dios para caminar y alinear nuestra mente y corazón a lo que él ha dicho en Su Palabra.


Jesús, mira a Jesús, nuestra fuente inagotable, míralo a él y verás el ejemplo máximo de servicio y dependencia a nuestro Dios.


Amén, Dios bendiga Su Palabra y a su pueblo Israel.


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